Cada año hay accidentes mortales de bebés y niños pequeños que son
dejados en autos mientras sus padres llevan a cabo actividades fuera. Un
estudio sostiene que no trata simplemente de un descuido irresponsable,
y que pudiera haber un conflicto de memorias en sus padres, informa EFE.
Morris Franco, director ejecutivo y encargado de relaciones con la
prensa de la organización Kars4Kids, subraya en declaraciones a la
agencia española que un conflicto entre la memoria "prospectiva" y la
memoria de los hábitos puede llevar a que una persona olvide a su propio
hijo en un automóvil durante horas.
Janette Fennell, presidenta y fundadora de Kids and Cars, otra
organización del mismo ámbito, coincide en que los fallos o trucos de la
memoria tienen mucho que ver en desgracias como la ocurrida este lunes
en Hialeah, ciudad aledaña a Miami.
La policía halló en dicha localidad a una niña hispana de once meses
dentro del automóvil de sus padres, que estaba con el motor apagado.
Según el comunicado policial, estaba inconsciente y fue llevada al
hospital, donde certificaron su muerte.
El termómetro marcó temperaturas de más de 30 grados celsius (87 grados
Farenheit) ese lunes en Miami y alrededores, donde además de registró un
elevado porcentaje de humedad.
Hasta ahora no hay detenidos y el caso sigue bajo investigación.
Tanto Kars4Kids como Kids and Cars realizan campañas de concienciación y
prevención de los "golpes de calor" dentro de los automóviles y pueden
ser mortales, especialmente para los menores de tres años, el grupo de
edad al que pertenece el 87 % de las víctimas, según Fennell.
La tecnología es clave para impedir más muertes como la de la pequeña de
Hialeah, subrayan Franco y Fennell.
Kars4Kids ofrece gratuitamente desde hace dos años una aplicación para
teléfonos móviles que ayuda a no caer en un olvido que puede tener
consecuencias
fatales. Ha habido más de 5.000 descargas hasta ahora, dice Morris Franco.
Kids and Cars, creada por Fennell después de haber sido secuestrada
junto a su esposo en 1995 y metidos en el baúl de un auto, mientras el
hijo de ambos quedó abandonado en el coche familiar, busca convencer a
las compañías automovilísticas de que coloquen dispositivos que
recuerden que hay un niño a bordo.
Si los autos de hoy en día te pueden avisar cuando te dejas las luces
prendidas, ¿por qué no pueden hacer lo mismo cuando hay niños?, dice
Fennell a Efe.
De acuerdo con las estadísticas de Kars4kids, desde 1991 hasta 2013 han
muerto en Estados Unidos 725 niños a causa de "golpes de calor" dentro
de vehículos.
Solo en 2013 fueron 44 y en 2015 se registró el menor número anual de
muertes infantiles por este motivo hasta la fecha (25).
De acuerdo con Fennell, en lo que va de 2016 han muerto ocho niños por
"golpes de calor" en vehículos y eso que "todavía no llegó el verano".
Kids and Cars conmemorará el próximo 8 de junio otro Día Nacional de la
Prevención del Golpe de Calor con el reparto de materiales informativos,
en inglés y español, sobre cómo prevenir y qué hacer en caso de que un
niño quede dentro de un automóvil.
La campaña "Mire antes de cerrar", de la organización fundada por
Fennell, propone cosas simples para recordar la presencia de un niño en
el asiento trasero de un automóvil, donde por ley debe ir, como dejar el
teléfono celular junto a él.
La falta del celular se nota enseguida, dice esta activista, quien
considera que el peor error que una persona puede cometer es pensar que
"a ti no te puede pasar".
Franco, al igual que Fennell, señalan que es equivocado pensar que los
padres a los que se les muere un hijo dentro del coche por un golpe de
calor son personas sin corazón o sin mucho cerebro.
Le puede pasar a cualquiera, la realidad es que personas consideradas
"respetables", con profesiones como médicos o abogados, han pasado por
esa tragedia, dice Franco.
El estrés, la falta de sueño y las cargas emocionales pueden propiciar
que eso ocurra, agrega el responsable de Kars4kids, quien explica cómo
la memoria de "hábitos", la que se genera a partir de información que
nuestro cerebro almacena de manera inconsciente, cuando hacemos algo
rutinario, puede imponerse a la "prospectiva", que tiene que ver con
recordar algo que debemos hacer.
Si una persona viaja todos los días a las mismas horas en su automóvil
desde un punto A, por ejemplo su trabajo, hasta un punto B, su casa, y
un día hace una parada entre ambos puntos para recoger a un niño, al
llegar al punto B y bajarse del automóvil como todos los días puede no
recordar que el niño está en la parte de atrás.
Kids4Cars realizó en 2015 una impactante campaña de concienciación por
internet en la que retaba a permanecer más de 10 minutos en un automóvil
recalentado por el sol y a grabar la experiencia. Nadie lo logró.